lunes, 30 de mayo de 2016

El Viaje de Gaia



Que maravillosa la madre tierra, llena de esplendor, de armonía, de amor en estado puro y en plena conciencia. A cuantos seres nos cobija entre sus ropajes… a nuestros hermanos los intraterrenos, a los seres de la superficie y, de vez en cuando, a nuestros hermanos extraterrestres. Cuanto amor alberga
en ella, consciente de cada uno de los proceso que estamos pasando todos y cada uno de nosotros.
Se ofreció hace miles de siglos a ser un planeta escuela, a que pudiéramos experimentar en ella sin poner ninguna condición, con la única premisa del libre albedrio de todos los seres que en ella habitasen. Después de muchos intentos con diferentes energías, lo conseguimos, consiguió con su paciencia llegar al punto necesario para nuestra evolución consciente y para su ascensión de nuevo al lugar que le corresponde. En no demasiado tiempo dejará de ser un planeta escuela, donde no se necesitará experimentar en ella. La labor para la que se ofreció se cumplió.
Gaia con energías renovadas afronta su paso de dimensión, consciente de su experiencia vivida con todos los seres de luz que en ella reencarnaron una y otra vez. Cuantas experiencias vitales para nosotros, para ella y para la totalidad.
De nuevo el plan divino sigue su curso, nunca paró, pero de nuevo se hizo consciente en la divinidad de la totalidad.
La edad de oro llegó, aunque parezca que todo está  mal, todo está  mejor que nunca. El 12/12/2012 fue la fecha clave y todo comenzó de nuevo. La madre tierra recogió sus frutos que tan merecidos eran y comenzó de nuevo su marcha, nuestra marcha como seres de luz encarnados. Es el momento de ponerse las pilas y comenzar a trabajar con la divinidad que todos tenemos dentro. Dejar atrás dogmas, limitaciones, apegos, etc. Navegar por fin, tomando decisiones conscientes para nuestra vida. Dejar de culpar a otros sobre los diferentes aspectos de nuestras vidas que no fluyen.
Tenemos a nuestro lado a La Confederación, los habitantes de las ciudades intraterrenas y un sinfín de seres de luz que en su amor incondicional nos acompañan durante nuestras reencarnaciones.
Todo lo que nos rodea está sincronizado, nada escapa a la sincronicidad de la Totalidad. Todo tiene su ¿Porque? Y su ¿para qué? Si entendemos que somos seres co-creadores comprenderemos perfectamente las respuestas a estas dos preguntas. No se trata de otra cosa que no sea tomar conciencia.
Navegar sin rumbo ya no es una opción. El compromiso con uno mismo es la única premisa. Todo está pasando muy rápido. Cada vez más, y a través de la mente colectiva se están bajando muchísimas informaciones de cómo entender todo lo que nos rodea, de entendernos y buscar en nuestro interior el mapa a seguir. Decidir qué quieres y que no quieres en tu vida, dejarlo ir sin miedo a nada, ni a nadie.
Sigamos a la madre tierra en su ascensión. Fluye sin poner resistencias a nada. Camina erguido, sin miedo en tu caminar. Eres un ser de luz, no lo olvides nunca.